El lado bueno de las cosas
Incluso al más reacio a ver pelĂculas con un romance de por medio le recomendarĂa ver El lado bueno de las cosas, nominada en 8 ocasiones en los Oscar incluyendo Mejor pelĂcula, director, actor, y actriz.
Inciso: Ninguna otra pelĂcula se habĂa hecho con las nominaciones de las categorĂas principales de los Oscar desde 1982.
En ella encontramos grandes interpretaciones y sorpresas, y no lo digo por Bradley Cooper y Jennifer Lawrence – que indudablemente están esplendidos – sino por dos de los personajes secundarios; Robert De Niro y Jacki Weaver, que interpretan a los padres del protagonista.
Estamos ante una de esas pelĂculas que tienen todo lo necesario para mantenernos expectantes y hacernos pasar un muy buen rato frente a la gran pantalla: impecables actuaciones – como ya mencionĂ© en el párrafo anterior -, una historia atĂpica y una pareja de protagonistas bastante curiosa.
Por un lado tenemos a Pat, un hombre bipolar que vuelve a casa tras pasar ocho meses en un centro de salud mental. AgrediĂł al amante de su mujer y a pesar de tener una orden de alejamiento, desea recuperarla.
Por otro está Tiffany, una chica testaruda, trastornada y enamorada a partes iguales que, tras perder a su marido, se ha acostado con nada más y nada menos que todos sus compañeros de oficina.
El lado bueno del género
Las comedias románticas destacan por su originalidad, pues por lo general tienen historias tĂpicas de final bastante previsible. Como podĂ©is ver podrĂamos meter esta en la lista de comedias románticas dignas de ver.
El lado bueno de las cosas puede presumir de estar a la altura de la maravillosa tragicomedia romántica Quiéreme si te atreves, protagonizada también por dos grandes actores como son Guillaume Canet y Marion Cotillard.
Estos dos Ăşltimos derrocharon en dicho film tanta quĂmica como Cooper y Lawrence en este otro de David O. Russell, que una vez más nos muestra su aficiĂłn a los personajes extremos llevando a Jennifer Lawrence hasta la piel de una viuda empujada a la ninfomanĂa, convirtiendo a Robert De Niro en un obseso de los Philadelphia Eagles…